El Atlético necesita remontar y pone todas sus esperanzas en su feudo y su gente. Un Metropolitano que vibrará desde el minuto uno y que enchufará a sus futbolistas desde el calentamiento. La desventaja es de un único gol y puede ser un partido y una eliminatoria larga. Simeone lo sabe y guardará recursos en el banquillo, aunque necesita que el Atlético salga más concentrado que en el Bernabéu, donde encajó muy pronto. El Cholo cuenta con De Paul y Lenglet. Además, Koke ha entrado en la convocatoria, por lo que toda la plantilla está disponible. Y hay cambios en el once: el míster rehace la banda izquierda entera.

La gran novedad en la alineación es que entran Reinildo y Gallagher en ese lado del campo. Se caen Javi Galán y Samu Lino, que sufrieron mucho en la ida ante Valverde y Rodrygo. El resto de la alineación es la esperada, la que formó en la ida de esta eliminatoria.

De este modo, para proteger a Oblak, Simeone monta una línea con Llorente en la banda derecha, Reinildo en la izquierda y Giménez acompañado de Lenglet, ya superadas las molestias que le impidieron jugar en Getafe. Le Normand se queda también en el banquillo.

En el centro del campo, De Paul y Barrios forman el doble pivote para gobernar el partido. A la derecha, ya indiscutible, Giuliano Simeone para amenazar a Mendy. Por la izquierda, la novedad. Gallagher en lugar de Lino. El británico aporta mucho esfuerzo, mucha presión, aunque menos desborde. El brasileño tendrá su momento en el segundo tiempo, como los Correa, Sorloth, Nahuel…

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Y en ataque, Griezmann, de quien Simeone dijo en la previa que está “convencidísimo” de que hará un gran partido, junto a Julián Alvarez, la gran esperanza en estos momentos de los rojiblancos, tanto por su golazo en el Bernabéu como por su excepcional estado de forma.

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