Al Real Betis no le intimidó que su rival tenga el apodo de los ‘conquistadores’. Tampoco que no perdían en casa desde el pasado 21 de septiembre (0-3 ante el Oporto). Menos aún lo iba a hacer el 2-2 de la ida en el Benito Villamarín o el espectacular recibimiento que le dio su afición al Vitória Guimarães en un Estádio D. Alfonso Henriques tomado por el humo y el confeti. Los de Manuel Pellegrini salieron a demostrar que sí les importa la Conference League y resolvieron la eliminatoria de octavos por la vía rápida con un ‘doblete’ de Cédric Bakambu en los primeros 20 minutos de partido y los goles de Antony e Isco en la segunda parte (0-4).
La clave del empate en el primer asalto de estos octavos de Conference League fue la capacidad que tuvo el cuadro de Luis Freire para frenar a los extremos béticos, Antony y Jesús Rodríguez. Pese a ello, Manuel Pellegrini repitió la receta. Esta vez, ambos estuvieron mucho más participativos, ganando línea de fondo y dejando buenas acciones. El paulista marcó y asistió en otra gran noche de Bakambu de ‘9’.
Cinco minutos tardó el congoleño en inaugurar el marcador. Lo hizo tras cuerpear muy bien con su marca y superar a Bruno Varela en el uno contra uno con una gran definición entre sus piernas. El Betis no bajó el ritmo y tras tener controlado el partido, empezó a encarrilar la eliminatoria con el segundo, también de Bakambu, en el minuto 20.
Cedric Bakambu celebra el 0-1 ante el Vitoria Guimaraes en la Conference League / ESTELA SILVA / EFE
El delantero africano firmaba su particular ‘doblete’ -su tercer gol en los octavos- con un cabezazo a placer tras un gran centro de Aitor Ruibal al corazón del área. Antony habilitó antes al español con un pase en el momento justo hacia la línea de fondo.
El Vitória Guimarães se desesperaba con el paso del tiempo, Altimira e Isco tenían el control del centro del campo y el cuadro portugués no generaba peligro. Su primera llegada fue un tímido disparo que blocó con facilidad Vieites, a los 40 minutos de partido. Un enganchón entre Nélson Oliveira y Diego Llorente evidenciaba la frustración del equipo local a pocos segundos del descanso. Situación que el neerlandés Gozubuyuk decidió solucionar con una amarilla para cada uno antes de enviar a los equipos a los vestuarios.
En la reanudación, el Betis bajó un par de marchas y el Vitória Guimarães casi se mete en el partido con un despiste de Vieites, que a punto estuvo de regalar un balón franco a Nélson Oliveira en una mala salida. Sin embargo, Antony, asistido por Isco, sacaría a relucir su capacidad goleadora en el 58′ con el 0-3 en un contragolpe que definió a las mil maravillas con un zurdazo al primer palo de Bruno Varela. El brasileño encadenaba cinco partidos sin marcar.
Antony celebra el 0-3 ante el Vitória Guimaraes / “Associated Press/LaPresse Luis Vieira” / LAP
Ya con todo resuelto, Pellegrini optó por dar descanso a Jesús Rodríguez y minutos a Abde. También reservó a Altimira, pasados los 70 minutos de juego. Pero aún quedaba tiempo para más magia al contragolpe. Esta vez, Antony le devolvió el favor a Isco regalándole el 0-4 a placer en el minuto 80. El Betis, a la contra, estaba siendo demoledor, pero el técnico chileno, que no quería sustos en forma de lesión, sacó del campo al andaluz y al goleador Bakambu.
El equipo de las Trece Barras, después de un contundente 2-6 en el global, se medirá en los cuartos al vigente campeón polaco, el Jagiellonia, que pese a perder por 2-0 en Bélgica ante el Círculo Brujas, hizo bueno el 3-0 de la ida en Polonia.